miércoles, 22 de septiembre de 2010

Promesas.



Noche en el skatepark, amigos, risas, bromas, una noche perfecta.

-Me ha llamado, está de camino.
-Dios mio...siento nauseas.

En ese momento no podía parar de pensar en lo que podría pasar, estaba muy nerviosa, me temblaban las piernas, no hacía otra cosa que mirar hacia atrás, estaba eufórica...

-Esta ahí
-Estoy nerviosa.
-Todo saldrá bien,seguro.

Me sonrió. Esa sonrisa me hizo que me calmara, me sentía segura de mi misma.
Bajé a sentarme a su lado. Todo el mundo miraba esperando a que ocurriera algo entre nosotros dos, el momento en que sus labios rozaran los míos. Empezamos ha hablar.
Él-tu sientes algo por mi
[un silencio inundó el momento]
Ella- Los dos sabemos perfectamente lo que sentimos el uno por el otro...
Él- lo sé.
Los nervios volvieron a mi cuerpo, rodeo mi cintura con sus manos lentamente, estaba nervioso y yo comencé a temblar de nuevo.
Él-¿Estás bien?
Ella- Es que...a mi estás cosas no pasan, no estoy acostumbrada a esto.
[De nuevo un silencio]
Él me miró, derrochando todo su apoyo en mi, me hizo sentirme segura.

Ella- Tengo miedo, tengo miedo de que esto estropee nuestra amistad, de que dejemos de hablarnos, que lo estropee todo. Tengo miedo de que no nos volvamos a ver. De que no sea lo mismo.
Él- Pero eso no pasará, yo se como soy... se que siempre la fastidio dejando de hablar, pero he cambiado. Ya no soy el capullo que era antes. Te prometo que nunca te dejaré de hablar pase lo que pase, lo prometo. Me gustas, me gustas y mucho. No eres igual a las demás y nunca había sentido nada igual por otra persona, eres diferente.
Ella- Tu a mi también me gustas, me gustas muchísimo, más de lo que pensaba, pero tengo miedo de que todo se fastidie.
Él- Yo también tengo miedo de que todo se fastidie.

Fui estúpida, no sé por que no le bese, tenía miedo, mucho miedo...y toda la la gente mirando. Fui estúpida, realmente estúpida. Me temblaban las piernas, pero me levanté. 
Después de ese momento no paraba de pensar en todas aquellas palabras que me dijo y me repetía a mi misma porqué no lo había besado. Estuve un rato contemplando como él y Carmina hablaban.
-¿Qué te ha dicho?
-Creo que necesitáis confianza a lo mejor no os conocéis lo suficiente... Ves ha hablar otra vez con él.

Me giré y ahí estaba sentado, esperándome.
Ella- he hablado con Carmina.
Él- Yo también. Creo que a lo mejor necesitamos conocernos más, pasar más tiempo juntos, tener más confianza...
Ella- Sí, quizás sea eso, conocernos más. Nos conocemos del verano pero me gustas...dime que nada cambiará que no me dejaras de habar.
Él- No te dejaré de hablar.
Ella- Vale. 
Una sonrisa apareció en mi rostro.Él me abrazó y yo le seguí. Estuvimos abrazados durante un tiempo y me dio un beso en la mejilla.
Me sonrojé y en ese momento supe que le quería realmente.

martes, 21 de septiembre de 2010

Él y yo.





él-
Hoy he estado con ella.
ella- ¿y qué tal?
él- GENIAL, pero he estado muy poco tiempo...
ella-No pasa nada, seguro que otro día estaréis más tiempo.
él- Eso espero. Es que ella es especial, nunca me había pasado algo igual por otra persona, no sé ella es...es diferente no es como las demás que eran unas mañacas estúpidas.
ella-¿La quieres no?
él- Sí ella es diferente.

Ya sabía que él me quería, me lo dijo Carmina y  él sabía que yo le quería. En ese momento Lorena, mi amiga de la infancia nos conocemos desde que eramos bebés, somos como hermanas, soltó un comentario ingenioso de los suyos.

-Tía, que sosa eres, él te está diciendo que te quiere, indirectamente y tú no le dices nada.
-¡Cómo que no le digo nada! aparte me da vergüenza...
-¡Venga ya, dile algo! en fin me voy, nos vemos mañana. 

Empezamos ha hablar  él y yo, como si no hubiera tiempo...era genial, me sentía feliz, alegre,risueña,amable, me sentía enamorada.


lunes, 20 de septiembre de 2010

Un gato amarillo.



Una de aquellas noches Carmina se quedó a mi casa a dormir.
 Leví, el novio de Carmina , un chico encantador en el que puedes confiar siempre (podría decir que es uno de mis mejores amigos) me advirtió:
-Vas a morir si duermes con ella, enserio...
-No creo que sea para tanto, de todas formas eso se verá esta noche...

 Aquella noche empezamos ha hablar y comprobaría si lo que decía Leví era cierto.
- Te gusta Plaza.
-No me gusta, es solo un amigo.

 Ella sabía que estaba mintiendo, me conocía y se me veía en la cara. Me ruborizaba y tenía los ojos brillantes cuando pronunciaba su nombre, sabía que me gustaba y no prodría ocultarselo por más tiempo.

-Vale, sí me gusta, pero no digas nada, aparte el no me quiere. Me lo dijo el otro día, está colado por otra.
-¡aaaaaaaaaaaah!- pegó un grito de emoción estrujando las sábanas- Lo sabía, al final te lo he sacado...Esque soy la ama.
-Bueno, bueno que te lo he dicho por que he querido, si no, no lo hubieras sabido.
-Te has puesto roja, oh dios que bonito.
-No es cierto- Sabía que sí me había puesto roja no, rojísima.
Encendimos la tele
-¿Qué ha sido eso?
-¿Lo qué?
-¡Son los extraterrestres!
-Tranquila un gato amarillo son salvará.
Nos miramos y las dos comenzamos a reír debajo de las sábanas. Nuestras conversaciones se basaban en lo primero que se nos pasaba por la cabeza, estabamos locas, muy locas.
-Buenas noches
-Buenas noches...y duerme tranquila un gato amarillo nos salvará.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Hormigas en mi estómago.



Maldita sea está sonando el teléfono, nadie sabe que las 16:00  es mi hora de relajación..
-¿Si?
-Carla,¿A qué hora quedamos?
-¿Das por echo que voy a quedar contigo?
-Obvio que sí, eso no se pregunta.
-Tócame a las 6.
   
 Esa era Carmina. Se convirtió en una de mis mejores amigas hace un tiempo. Ella es hermosa, muy buena amiga. Siempre está ahí cuando más lo necesitas, es...es genial que ella esté en mi vida. Su gran defecto: es muy cabezota.

Mientras transcurría la tarde, aparecieron Anna, María y Plaza. A las dos chicas no las conocía pero a él sí. 

Eran las 21:00 y empezaba el fútbol, todos estábamos en casa de Carmina, esperando a que ESPAÑA ganara de nuevo. 
Justo fue en ese momento cuando el amor surgía Cupido lanzando sus flechas,haciendo que nuestras mejillas se sonrojaran al rozarnos y unas hormigas se apoderaban de nuestro estómago en el mismo momento que nuestro corazón daba un vuelco.
Nunca pensé que él me iba a gustar.
Ese fue el momento en que supe que el amor florecía de nuevo.

Soy una pequeña individua más en este pequeño mundo de escritores

Hola, me llamo Carla Esclapez Nohales y soy una entre muchos. Soy nueva aquí, así que no esperéis mucho :]
PD: Espero que os guste.